El comisario Pablo Herrera Silvetti, jefe de Relaciones Policiales, confirmó que el lanzamiento de una granada de gas lacrimógeno ocurrido anoche al finalizar el encuentro deportivo en el estadio “23 de Agosto” fue una acción individual de un uniformado y que ya se iniciaron actuaciones administrativas. Además, interviene la Justicia para determinar otras posibles responsabilidades.
La Policía de la Provincia informó que se abrió una investigación interna contra el efectivo que arrojó gas lacrimógeno en el sector preferencial del estadio, tras el partido entre Gimnasia de Jujuy y Agropecuario.
El comisario Silvetti explicó que “ningún superior había ordenado ni autorizado la utilización de este tipo de elementos” y que el accionar del agente está siendo evaluado por la jefatura policial.
Según el primer informe, el uniformado habría usado el artefacto en un intento de repeler agresiones y proteger su integridad física** tras verse superado por la cantidad de simpatizantes que se abalanzaron hacia la zona donde cumplía funciones.
“Se manejó como hipótesis que este hombre lo activó para preservar su vida, pero eso no quita que su proceder haya sido equivocado”, señaló Silvetti.
Tras el hecho, un civil tomó el artefacto y lo trasladó hacia otro sector, pero fue demorado inmediatamente por personal de seguridad. El objeto quedó secuestrado y la persona fue puesta a disposición del Ministerio Público de la Acusación “Mientras tanto, nuestra fuerza ya inició las actuaciones internas correspondientes”, agregó el comisario.
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