
En Jujuy, los datos reflejan una realidad preocupante: casi 4 de cada 10 chicos de sexto grado fueron víctimas de acoso escolar o exclusión.
Un nuevo informe de la organización Argentinos por la Educación expone una cruda realidad que atraviesa a miles de estudiantes en todo el país: el 63% de los alumnos de sexto grado aseguró haber sufrido agresiones o discriminación por parte de sus compañeros, ya sea en la escuela o a través de redes sociales. En la provincia de Jujuy, los datos no distan del promedio nacional: el 39% de los estudiantes también denunció haber padecido estas situaciones.
El relevamiento se basa en las respuestas al cuestionario de clima escolar aplicado durante la prueba Aprender 2023, lo que brinda una perspectiva profunda y representativa sobre las dinámicas de convivencia en las escuelas primarias.
Además, el 34% de los estudiantes reconoció haber agredido a un compañero, mientras que un preocupante 36% manifestó haberse sentido discriminado en el entorno escolar.
Aunque la mayoría de los niños (99%) dijo tener amigos, y el 94% aseguró sentirse cómodo con el personal docente y no docente, la experiencia escolar está lejos de ser ideal para muchos:
- El 56% afirmó haberse sentido excluido alguna vez.
- El 40% dijo sentirse incómodo o fuera de lugar.
- El 36% reconoció haberse sentido solo.
Entre los motivos de discriminación más frecuentes, se destacan el aspecto físico, los gustos personales, y la orientación sexual o identidad de género. El informe también revela que más de la mitad de los alumnos (56%) presenció situaciones de violencia entre pares durante el último año.
Las formas de agresión abarcan desde insultos y amenazas hasta robo o daño de pertenencias, además de agresiones físicas. También se reportan casos de ciberbullying, una modalidad que trasciende los muros escolares y amplifica el daño a través del entorno digital.
Según los datos recopilados, el 42% de los alumnos de escuelas públicas dijo sentirse discriminado, lo que sugiere que el fenómeno tiene vínculos con desigualdades estructurales que requieren una urgente intervención institucional.
El informe no solo pone cifras a una problemática cotidiana, sino que interpela a la comunidad educativa, al Estado y a las familias: el bullying no es un “chiste de chicos”, sino una violencia sistemática que erosiona vínculos y derechos desde las edades más tempranas
Descubre más desde Buen Dia Jujuy
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.