Jujuy amaneció con una verdadera postal inolvidable. Minutos antes de las 7:30, cuando el sol comenzó a asomarse detrás de los cerros, el cielo se transformó en una paleta de intensos naranjas, rojos y dorados que maravillaron a quienes tuvieron la suerte de contemplarlo.
La conocida hora dorada en Jujuy es uno de los fenómenos naturales más admirados tanto por locales como por turistas. Se da dos veces al día al amanecer y al atardecer cuando el sol se encuentra en un ángulo bajo respecto al horizonte y la luz adquiere un tono más cálido, suave y envolvente.
La explicación científica está en la dispersión de la luz solar. Durante la salida o la puesta del sol, los rayos deben atravesar una mayor porción de la atmósfera que en las horas centrales del día. En ese recorrido, las ondas cortas (azules y verdes) se dispersan en el aire, mientras que las longitudes de onda más largas (rojas, naranjas y amarillas) llegan con mayor intensidad a nuestros ojos.
Este proceso, conocido como dispersión de Rayleigh es el mismo que hace que el cielo se vea azul durante gran parte del día, pero en la hora dorada permite que los tonos cálidos dominen el horizonte.
La duración de la hora dorada varía según la ubicación geográfica y la época del año.
- En países cercanos al ecuador suele durar entre 20 y 30 minutos.
- En regiones australes como Argentina, puede extenderse de 30 a 60 minutos.
- En invierno el fenómeno es más breve, mientras que en verano puede prolongarse más tiempo.
Además, factores como la presencia de montañas, nubosidad o partículas en el aire intensifican o atenúan los colores, regalando cada día un espectáculo único e irrepetible.
La hora dorada en Jujuy no solo embellece el paisaje natural, sino que se ha convertido en un atractivo para fotógrafos, cineastas y amantes de los paisajes que buscan capturar la luz perfecta en sus imágenes.
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